nueve

Dime ¿Qué necesitas?. Yo estoy aquí para dártelo, para darte gusto, para hacer  lo que me pidas. Me encanta entregarme a los demás, lo que yo necesito no es en este momento tan importante. Siempre me vas a ver bien, sonriente, contento con lo que tenga. La vida me ha puesto en este lugar, un lugar de servicio a los demás, y yo lo acepto, complaciente. Dicen que soy bondadoso (a). Puede que a veces sea duro (a), que me quede sin tiempo para mis cosas, pero es por una buena causa. ¿Qué sería del mundo sin la cruz roja, sin los voluntariados y las causas humanitarias?. Soy una persona muy flexible, por eso no me queda difícil dejar lo mío por un rato para escucharte, para entender tus necesidades. Me encantan los grupos, siempre he pertenecido a alguno. Y, lo curioso, es que me gusta  pasar desapercibido en ellos, soy el que ayuda en la cocina por timidez de quedarme en la sala a enfrentar la conversación completa. Tengo algo de “Boy Scout” , de niño explorador. Y me gusta seguir a la gente que sabe plantear nobles ideales, en ese caso hago lo que se me sugiere, soy cumplido. Pero a veces me cuesta darme cuenta que en realidad no quería hacer algo que llevo mucho tiempo haciendo, y que complace a los que quiero. Es difícil ver el sufrimiento de los demás cuando uno deja de complacerlos, da mucha culpa. Me dicen que ponga límites, pero yo prefiero que nadie se vaya a enfurecer, y menos conmigo. Iniciar proyectos no es fácil, sobre todo si son ideas propias, y hay que convencer a la gente de unirse a alguna causa. A veces me falta energía, o me viene el desanimo, estoy como sin vitalidad propia. Entonces me doy cuenta que hay gente mucho mas apasionada que yo, o me siento un poco conformista, pasivo, sin iniciativa, la vida se vuelve aburrida. Me dicen que tengo que tener mi propia vida ¿Cómo así? ¿es que no es esta?. Llego tarde a las citas, o no salgo a cumplirlas, me doy una excusa, porque no me levanté a tiempo, o estuve posponiendo el asunto, tal vez en realidad no me motivaba hacerlo. Que no me presionen, no respondo bien a exigencias, no quiero que me digan que hacer, sobre todo me molesta que me digan cuando hacerlo. Un poco más de voluntad me caería bien, ser menos disperso, concentrarme mas, no dejarme seducir tan fácilmente por personas o situaciones, vivir mas experiencias  placenteras.